Las tecnologías son esenciales para el desarrollo sostenible, pero también podrían acentuar las desigualdades. ¿Estamos preparados para la tecnología de vanguardia? De los responsables de la formulación de políticas depende reducir este riesgo y hacer que la preparación para las tecnologías de vanguardia contribuyan a aumentar la igualdad.
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Debes estar suscrito para acceder poder visualizar el informe. Puedes elegir cuál de los Planes de Suscripción te conviene o ver los detalles de tu suscripción actual visitando Tu CuentaLa preparación para la tecnología de vanguardia tiene profundas implicaciones económicas, sociales y estratégicas. En un contexto global en el que la tecnología avanza rápidamente, el nivel de preparación de la región determinará su capacidad para competir, innovar y cerrar brechas de desarrollo con economías más avanzadas.
Impacto económico
La tecnología de vanguardia, como la inteligencia artificial, la robótica, el internet de las cosas y la blockchain, tiene el potencial de transformar sectores clave como la industria, la agricultura, la salud y los servicios financieros. Para Sudamérica, aprovechar estas tecnologías puede aumentar la productividad, reducir costos y fomentar la creación de empleos de alta calificación. Sin embargo, también presenta desafíos, como la automatización de procesos, que podría desplazar a trabajadores en ocupaciones tradicionales si no se implementan políticas de reconversión laboral.
La capacidad de competir en un mercado global depende en gran medida de la adopción tecnológica. Los países que no estén preparados para integrar estas herramientas quedarán rezagados en términos de comercio, inversión extranjera y capacidad de innovación.
Implicaciones sociales
La preparación tecnológica también afecta directamente la calidad de vida. Tecnologías avanzadas pueden mejorar el acceso a servicios esenciales como la educación y la salud, mientras que la conectividad digital puede reducir desigualdades al facilitar el acceso a oportunidades de aprendizaje y empleo en zonas rurales y urbanas. Sin embargo, una integración desigual podría exacerbar las brechas sociales si no se abordan problemas como la falta de acceso a internet y la baja alfabetización digital.
Estrategias de preparación
Para estar preparados, los países de Sudamérica necesitan invertir en educación y formación, especialmente en disciplinas STEM (ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas), fomentar la investigación y el desarrollo (I+D), y fortalecer la infraestructura digital. Las alianzas público-privadas y la colaboración internacional son esenciales para transferir conocimiento y recursos.
Riesgos de no actuar
Un retraso en la preparación tecnológica puede consolidar la dependencia de la región de tecnologías extranjeras, limitando su soberanía tecnológica y aumentando la vulnerabilidad a riesgos como ciberataques o crisis económicas globales.
Conclusión
La preparación para la tecnología de vanguardia no es opcional para Sudamérica; es una necesidad estratégica para garantizar su desarrollo sostenible, equidad social y competitividad global. Con la inversión adecuada y políticas inclusivas, la región puede aprovechar el poder transformador de la tecnología para asegurar un futuro más prometedor.
